jueves, 21 de febrero de 2013

No puedo ver fútbol con mujeres




Hace un tiempo, mirando uno de esos amistosos de verano, le comenté a mi hermana
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-                 -  Mirá la nueva camiseta de Boca.
A lo que ella respondió
-  ¿Cuál? ¿Esa verde?
- No, ese es el árbitro. – Y acción seguida me pegué un martillazo en la cabeza para tratar que mi mente suprimiera lo que acababa de ocurrir.

Fue ese día cuando confirmé mi teoría de que YO no puedo ver fútbol con mujeres.

Si de machismo y feminismo se trata, soy el primero en defender la igualdad, pero cuando en el medio de esa disputa se encuentra una pelota,  no puedo evitar mandar a la mierda todo eso de “SOMOS IGUALES.”

Y es que hay ciertos comentarios y/o preguntas que las mujeres acostumbran a hacer durante un partido, que nos llevan a nosotros, los hombres, a querer sacarnos los ojos con un sacacorchos y jugar a las bolitas con ellos.

El epicentro del problema está en que muchas veces (casi siempre) ellas no saben que esos dichos nos irritan cual bóxer mojado, y nuestra cara de culo de vieja con hemorroides no es suficiente para que lo noten.

Así que hoy, involucrándome un poco en el asunto, les dejaré una lista de las cosas que NUNCA JAMAS EN LA VIDA deben decir cuando estamos viendo un partido para facilitarles las cosas y ahorrarles una posbile discusión.
   
1-      “¿tanto lio por un partido de fútbol?”

2-      “Al final son once boludos corriendo atrás de una pelota”

3-      “¿Por qué tu equipo nunca gana?”

4-      “¿Si pierde ya queda afuera?”

5-      “¿Si empatan van a penales?” (Acto seguido contestás: “NO, SI EMPATAN EMPATAN” y ella te responde: “AH NO PASA NADA ENTONCES.” A lo que vos querés responder “NO, SOLAMENTE PERDEMOS 2 PUNTOS, NOS PASAN LOS DOS HIJOS DE MIL PUTA DE ABAJO EN LA TABLA DE PROMEDIOS Y SI EL CAMPEONATO TERMINARA HOY TENDRÍAMOS QUE JUGAR UN DESEMPATE PARA NO DESCENDER” pero decidís guardártelo para vos y contestar “NO, NO PASA NADA…”

6-      “¿Gol de tu equipo?” (Mientras el relator canta el gol del equipo rival, los jugadores contrarios se abrazan, los tuyos protestan al árbitro y tu cara de orto raspa el suelo)

7-       “Pero se re tiró”. (Mientras vos puteas a todas las mujeres del grupo familiar del árbitro porque no cobró un supuesto penal) 

8-      “¿Por qué es offside?” (Y vos, sabiendo que es más fácil hacerle entender  la teoría de la relatividad a un helecho, intentás explicarle la ley del offside con la misma paciencia que las maestras del jardín Tribilín)

9-      “Se escucha mas a la otra hinchada”

10-   “Que lindo que le queda el cuellito tipo chomba a la camiseta” (En el momento en que tu equipo define el partido por penales y vos de los nervios ya te comiste todas las uñas y ahora vas por los nudillos.)

11-   “Que lindo que es ese jugador, ¿Cómo se llama?” (Refiriéndose siempre a algún hijo de puta del equipo contrario que encima seguro cinco minutos antes  metió un gol)
  
12-   “¿Nosotros cuál somos? ¿Los azules o los blancos?”


13-   “No entiendo ¿Por qué querés ver Mallorca vs Deportivo La Coruña? “

14-   “¿Para qué vas a ir a la cancha si siempre pierden?”

15-   “Los que quedan debajo de esa bandera gigante no deben ver nada, pobres” (Haciendo alusión a los telones con los que a veces reciben a los equipos cuando salen a la cancha)

Si te sentiste identificada con por lo menos cinco de estos ítems deberías empezar a tener mas cuidado con tus comentarios, por tu seguridad y la del hombre es cuestión. 

Espero que les haya servido para una convivencia sana y en paz. 

LES RECUERDO A TODOS QUE NO ES NECESARIO TENER CUENTA EN GOOGLE PARA COMENTAR, SOLO ELIJAN LA OPCIÓN “NOMBRE/URL” (Y completen nada más que el nombre) O BIEN LA OPCIÓN “ANÓNIMO” SI LES DA VERGÜENZITA DEJAR SU NOMBRE. 

Si les gustó pongan ME GUSTA por favor y compartan en Facebook y Twitter. Además no se olviden de seguir al blog en ambas redes sociales para enterarse en el momento cuando subimos algo. Saludos!

 Hernán Colman

viernes, 15 de febrero de 2013

Dibujitos desanimados





Muy pero muy buenos/as días /tardes /noches según la hora en la que estén leyendo esto.

Cómo podrán ver Tiempo para Divagar volvió luego de unas muy merecidas y reconfortantes vacaciones de verano. A esta altura del partido se habrán dado cuenta que no tenemos un carajo que ver con esos blogs comprometidos con los lectores donde publican de forma regular los diferentes artículos.
 Dicen que cada mascota se parece a su dueño y que cada blog se parece a su ¿bloguero? (Así se lo escuché decir al encantador de perros en un especial sobre perros y blogs) y se ve que es una gran verdad.

El motivo de mi reencuentro con el teclado se debe a que tengo la intención de hablarles de uno de los problemas más serios de la sociedad moderna: LOS DIBUJOS DE MIERDA QUE PASAN EN LA TELE HOY EN DÍA.

Quisiera utilizar una frase hecha, que sinceramente no me enorgullece, si no todo lo contrario ya que en cierta forma delata que me estoy volviendo un viejo choto de 21 años (Los viejos de verdad en este momento están queriendo darme un zapatillazo, lo sé) pero la verdad es que no hay otra frase mejor para decir: DIBUJITOS ERAN LOS DE ANTES (Mierda, se me puso la pantalla en blanco y negro... Ah no, así es el color del blog)

Si pasaste una gran parte de tu infancia durante los años noventa sabés bien de lo que hablo. Ya la emoción con la que nos sentábamos a ver la tele era diferente, porque no teníamos mucho más para hacer ni muchas otras formas o momentos para verlos. Era en un determinado canal y a un determinado horario o te cagabas. No existía YouTube  como ahora donde suben los capítulos antes de que se estrenen y con doce horas extra de duración.

 En mi casa cuando mis hermanos y yo éramos chicos, tocar el control remoto al medio día podía costarte las tres falanges del dedo: Era la hora sagrada de Dragon Ball y pobre de vos si se te ocurría cambiarlo.

Hoy en día eso no pasa, con tanto internet, tecnología y celulares con saca corcho, la tele quedo en un segundo plano para los chicos. Nosotros lo más cercano a una tabled que teníamos era el “Tablón” del peladito de “Edd Edd y Eddy.”

Aparte eran más simples: el Coyote corría al Correcaminos y terminaba quedando como un boludo, hoy ya no lo corre más, lo sigue en twitter el muy hijo de puta. Pero bueno, se ve que las plantitas verdes todavía no habían hecho efecto en las neuronas de los escritores en aquellos años.
Escooby Doo y Coraje se cagaban en las patas por cualquier cosa, no formaban una liga extraordinaria de perros con relojes disparadores de rayos letales para combatir al mal.

Incluso los animes cambiaron de una forma abismal. Y eso que ya desde sus inicios carecían bastante de sentido, pero se hacían entender. Por ejemplo:  Goku peleaba contra el ser más poderoso del universo, lo hacían cagar a krilin, Goku ganaba y lo revivía con las Esferas del Dragon, y así casi todas las temporadas. Pokemón contaba la historia de un boludo de  gorrita que perseguía bichitos raros para hacerlos pelear entre sí (Nada que envidiarle a la riña de gallos en Malasia). Eran re flayeros pero te permitían seguir la línea de locura que el exceso de arroz en la sangre le generaba a los japoneses. 

Ahora ya se van de tema, te cuentan cosas como: “La historia de una chica conejo que cuando se descubre su lesbianismo es expulsada del paraíso y decide dedicarse a pelear contra almas oscuras en un mundo de fantasía” ¿Qué carajo?  Lo peor es que eso es solo la introducción de la historia, no ocurre a lo largo de toda la serie, NO SEÑOR, pasa en el primer capítulo. Por ende, si vos la agarraste empezada  ¿Cómo mierda haces para entender que la pendeja es mitad conejo, que la echaron del paraíso, y que le gusta más la chacón que el dulce de leche?  Es muy complicado señores.

Así que desde acá propongo recuperar esa simplicidad que tenían los dibujitos de antes y acabar con toda la mierda que hay ahora.

Me despido no sin antes decirles que si les gustó, si están de acuerdo, si les pareció una mierda, etc. etc. no duden en poner ME GUSTA y sobre todo COMENTAR,  y recuerden que por cada uno que comparta este árticulo, Google donará 0,00001 centavos a la fundación “Ladridos sin sabor” que ayuda a perros que nacieron sin papilas gustativas. Saludos, y ni idea cuando nos volveremos a ver porque ya saben que soy un desastre.

Hernán Colman